LA PIEDRA DE AMETHYST

Titón no había conseguido derrotar a Jálibu, así que él siguió haciendo el mal entre los humanos. Entre uno de los magos que Gormul creó estaba Lord Answer. Este mago era sabio y muy curioso. Creció en los aposentos de Gormul, en un gran castillo a las afueras de Dámbil. El castillo era muy grande y estaba lleno de amplias salas y espaciosas habitaciones.

Un día al entrar Lord Answer en la biblioteca del castillo divisó un viejo libro lleno de polvo. Cuál fue su sorpresa cuando al cogerlo una gran puerta apareció ante sí. Guardó el libro en uno de sus grandes bolsillos y observó a su alrededor, al ver que no había nadie abrió la gran puerta de madera, que desprendió un gran crujido.

Al entrar en la sala se encontró una antigua habitación con sus paredes cubiertas de grandes y amplias estanterías. En cada una de las esquinas de la sala se encontraba una gran telaraña y al lado de una de las estanterías custodiando la habitación había una antiquísima armadura plateada. Había todo tipo de libros clasificados según su antigüedad y en el centro de la sala se encontraba una larga mesa de madera.

Lord Answer cerró la puerta y se sentó en la mesa, una vez allí sacó el libro de su bolsillo y sopló sobre él quitándole el polvo que tenía. Lo dejó encima de la mesa y pudo ver en él una frase que decía, “El misterio de Amethyst”. Empezó a leer el libro y cuando pasó a la página dieciocho, tres hojas cayeron al suelo. Se agachó y se dispuso a verlas cuando, de repente, Gormul entró en la biblioteca. Lord Answer guardó el libro y las tres hojas en su bolsillo y se dispuso a salir de aquella sala misteriosa.

Cuando por fin pudo estar solo, dentro de su habitación, sacó las hojas y las colocó sobre su cama. Se dispuso a leerla; la primera de todas tenía el número 19 en una de sus esquinas inferiores y era una especie de pequeño mapa de Dámbil. La segunda tenía el número 20 en la esquina derecha y era una carta de un tal Nogmeo dirigida al rey, en ella se relataba cómo Gormul estaba acabando con su pueblo. Por último la tercera hoja tenía un número 21 en su esquina izquierda y era un pequeño escrito que hablaba de una extraña piedra preciosa.

Answer se vio impresionado y empezó a interesarse por este tema. Todos los días realizaba la misma operación en la biblioteca; cogía un libro y entraba en la sala. Descubrió muchas cosas sobre Gormul y sus intenciones.

Un buen día decidió fugarse del castillo y continuar su investigación. Construyó una pequeña y confortable cabaña en el bosque Sombrío y comenzó a hacerse preguntas: ¿Qué es lo que quiere Gormul? ¿Por qué quiere acabar con los humanos?- Para responder a esas preguntas sólo podía hacer una cosa. Así que se encaminó hacia Dámbil en busca de los jefes de las cuatro tribus. Una vez allí les contó lo que había descubierto y lo que había visto en la casa de Gormul. A lo que ellos contestaron con una leyenda.

Cuenta la leyenda-empezaron a decir- que hace muchos años un gnomo llamado Nogmeo encontró una piedra en el bosque, la llamada Amethyst, esa piedra poseía unas extrañas cualidades mágicas que aún no se habían descubierto. Quizás por eso Gormul se interesó por ella y decidió robársela a Nogmeo. Nogmeo conocía sus intenciones así que metió la piedra en una urna de cristal y la escondió en un lugar secreto. Tan sólo se lo contó a Titón, que nunca se había atrevido a buscarla. Titón dice que sólo aquel que consiga encontrar la piedra y apagar su fuego será capaz, con la ayuda de los 4 jefes de matar a Gormul y acabar con el sufrimiento de los humanos-concluyó uno de los jefes.

Lord Answer le dió las gracias a los jefes de las tribus y siguió su camino. Ahora fué en busca de Titón. Cuando lo encontró comenzó a explicarle todo lo que le había sucedido y le pidió que le ayudara a buscar la piedra de Amethyst. Él aceptó y los dos se encaminaron a buscarla. Gracias al mapa que Lord Answer había encontrado anteriormente, consiguieron llegar sanos al lugar indicado. Se encontraban en un llano del bosque, donde había un gran viejo árbol. De repente Titón se acercó y sacó del tronco la pequeña urna de cristal.

Al abrirla una gran luz surgió de la piedra y delante de ellos aparecieron los 4 jefes de las tribus. Todos juntos formaron una estrella con sus cuerpos y posaron sus manos sobre la piedra de Amethyst. Justo en el momento en el que apagaron la llama el Amo Negro les sorprendió. De un momento a otro se vieron envueltos en una gran y feroz batalla, la batalla definitiva.

CONTINUARÁ...

Por Ana Rodríguez Rusillo